Doctora en historia por el Instituto de Historia Universal de la Academia de Ciencias de Rusia. Hasta su retiro en 2017, fue investigadora del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México. Cuando los archivos rusos se abrieron a la consulta pública, encabezó un proyecto para recuperar y dar a conocer documentos sobre la historia mexicana en el periodo de entreguerras. Entre esos materiales inexplorados se encontraba el diario que Alexandra Kollontai llevó durante su gestión como embajadora en México. La traducción de esos apuntes (Alexandra Kollontai en México: Diario y otros documentos. México: Universidad Veracruzana, 2012) fue el principio para adentrarse no sólo en el archivo personal Kollontai, sino en su correspondencia y otros materiales dispersos en otros repositorios.